
En el mantenimiento industrial existen diferentes técnicas y modos de proceder, uno de los más empleados en instalaciones complejas es el Mantenimiento Basado en la Condición. Esta forma de mantenimiento ha sido mejorada gracias a la implantación de nuevas tecnologías en la industria.
La digitalización ha hecho que podamos realizar los procesos de forma más precisa, contando con gran cantidad de datos y pudiendo procesarlos junto a los datos obtenidos offline. Vamos a profundizar en esta una forma de mantenimiento industrial que aprovecha la transformación digital.
¿Qué es el Mantenimiento Basado en la Condición?
El Mantenimiento Basado en la Condición es conocido también por sus siglas en inglés: CBM. Consiste en monitorizar en tiempo real la instalación para establecer qué mantenimientos son necesarios en cada momento.
Para monitorizar una máquina, por ejemplo, podemos emplear datos extraídos de inspecciones visuales, pruebas de funcionamiento o incluso de sensores internos que pueda poseer la máquina.
Cuantos más datos tengamos, más adecuado será el mantenimiento. Por este motivo la transformación digital aporta mayor precisión a este tipo de procedimiento. Hoy podemos obtener datos a través de sensores muy precisos que a su vez están conectados a internet.
Se puede realizar gran cantidad de mediciones, por ejemplo: análisis de vibración, análisis de presión, análisis de ultrasonido, análisis eléctrico, análisis lubricante o termografía infrarroja, entre otros.
Gracias al Mantenimiento Basado en la Condición podemos llevar a cabo el mantenimiento de los equipos cuando realmente es necesario en lugar de realizar mantenimientos preventivos. De esta forma ahorramos tiempo y dinero que en ocasiones se gasta de forma innecesaria.
¿Cómo aplicar el Mantenimiento Basado en la Condición?
En el mantenimiento industrial tenemos otro tipo de proceso, el RCM, que sirve de apoyo al Mantenimiento Basado en la Condición. El RCM nos permite prever los tipos de fallos que pueden producirse y estar preparados para solventarlos. De esta forma, el Mantenimiento Basado en la Condición se realiza de forma más eficaz.
Cuando se detecta un fallo, se debe realizar un análisis de criticidad. Se identifican los fallos como críticos, semicríticos o no críticos. De esta forma podemos solucionar los fallos críticos y no perder el tiempo en solucionar los fallos menos relevantes.
El personal técnico debe estar implicado en el análisis de criticidad. Son los encargados de elaborar planes de mantenimiento y deben tomar partido también en la identificación de fallos críticos. En Excellent insistimos en que las tareas sean realizadas siempre por profesionales especializados para evitar errores y pérdidas de dinero.
Una vez solucionado un problema se deben realizar seguimientos para asegurarse de que todo está en perfectas condiciones tras las reparaciones industriales. Es importante ser minucioso cuando se trata de mantenimiento industrial.
Existen instalaciones que sin un adecuado mantenimiento pueden ser verdaderamente peligrosas, como las instalaciones de combustibles líquidos, el mantenimiento de calderas o las instalaciones de gas. Sin embargo y como empresa especializada en la Externalización de Servicios, sabemos que con un adecuado Mantenimiento Basado en la Condición y la ayuda del RCM se puede tener una instalación en perfectas condiciones.